Curso de Gasfitería

No pensé que iba a poder desarmar, armar e instalar el calefón. El relator, muy experimentado y con paciencia. Se nota que le gusta lo que hace.  

R.L.

Soy informático, pero me gusta ahorrar en cosas que uno pueda hacer con las manos. Me distrae y me sirve para ahorrar.  

Y.Z.

Curso corto, pero preciso. Es lo que quería: harta práctica. Con esto entenderé mucho más los tutoriales que se ven en YouTube.  

I.R.

Tomé el curso para no depender tanto de los gasfiter. Aprendí mucho más de lo que necesitaba. Ahora podré opinar cuando me arreglen el calefón.  

F.Q.

Nunca había intentado arreglar el calefón, y eso que soy mecánico. Quedé listo con el curso, ya no gasto más en gasfiter. El uso de las cañerías PPR o de plástico me puede generar un tremendo ahorro en una extensión, reparación o instalación nueva de agua potable.  

H.B.

Pensaba que el tiro forzado y el ionizado eran más complicados, pero igual me sirvió para aprender algunas fallas en el calefón que no conocía. Ahora las puedo solucionar. Me gustó soldar las cañerías de plástico, no había trabajado con esas.  

A.E.

Yo había hecho algunos arreglos, como cambio de pilas y revisión de conexiones. Ahora sé todo cómo funciona y las reparaciones que más salen. Valen las lucas, las recupero en tres arreglos. ¡Gracias!  

Á.B.

El curso: pura práctica, con todos los secretos del calefón. Lo desarmé y armé, y me fue el profe indicando todas las fallas que pueden tener. Justo lo que yo buscaba. La práctica de soldadura en cobre y PPR también estuvo buena.  

V.C.